{ 🇪🇸 & 🇪🇸 }
Llenos de magia han llegado Jorge y Lucía a su boda que estábamos esperando con cierta ansiedad. Un malabarismo de preparativos verdaderamente cautivadores nos encontramos a lo largo de todo el recorrido que supuso este magnífico enlace para construir nuestro reportaje de boda.
Cercano al par de centanares han sido los invitados y todos ellos de verdad maravillosos, nos han dado juego sutil y dinámico a la hora de hacer nuestro proyecto; unas horas deliciosas que además y gracias a la estupenda organización de la finca de celebración, Miravalle, todo ha ido a pedir de boca.
El día ha ido caminando con un clima algo desapacible pero ha sido lo de menos porque la sensación de buen rollo y magnífica diversión han sido tónica constante. Colorida, divertida, con momentos llenos de nueva expectación gracias a unos novios que no han dejado indiferente a nadie.
Muchos regalos y todos esos instantes llenos de glamour pincelado con una diversión irrefrenable, los padres y los familiares han estado muy de enhorabuena igualmente pues se han visto sorprendidos por detalles llenos de nostalgia y buen gusto.
Esperábamos la boda con mucho entusiasmo y desde luego ha superado con creces nuestra expectante ilusión por realizar este precioso reportaje nupcial.